Este encargo resulta muy particular tanto por lo específico del programa como por las características del comitente. Comunidad Organizada es una cooperativa de vecinos del barrio de Cuartel V, Moreno, que desde hace 7 años se organizan para mejorar el lugar donde viven. Sus logros son muy importantes, ya que lograron gestionar la red de gas natural para 3000 hogares, realizando convenios con organismos estatales y privados, y organizando a toda la gente del barrio para poder llevar adelante el emprendimiento. Habiendo alcanzado un alto nivel de organización, aprendiendo a la vez que realizaban esta tarea, se plantean nuevos objetivos como cooperativa de trabajo: hacer la señalización de las calles del barrio, el agua potable, el tratamiento de efluentes cloacales. Todo esto desde una lógica distinta a la "privada" y también a la "estatal", porque todo se hace con una metodología comunitaria, sumando voces y aportes de todos los interesados, y "haciendo escuela" a medida que se trabaja, para que ellos y otros puedan capitalizar las experiencias.
A través de gestiones con la Municipalidad de Moreno, logran que les donen este terreno para construir su sede. El programa de la misma se consensúa en asamblea, y se plasma en un primer plano de distribución de los espacios. Dicho programa incluye una escuela-taller, locales comerciales para emprendedores del barrio, un salón de fiestas para la comunidad, oficinas administrativas de la cooperativa, una biblioteca popular, un bar, un quincho para asados, un área deportiva, baños públicos con duchas para los que practican deportes, y espacios para el montado de ferias, recitales y exposiciones.
La búsqueda proyectual pasó por materializar este concepto de apertura espacial de la comunidad: "de la puerta para afuera también es mi casa, de la puerta para adentro también es mi barrio". De modo que se armó un "portal" de acceso al predio, materializado entre las oficinas y locales por debajo y el salón de fiestas por arriba. Este portal-puente es lo suficientemente amplio como para que nunca esté cerrado, y no marque un adentro y un afuera sino un "a través": a ambos lados del portal sigue existiendo el barrio. El uso de colores básicos y materiales como la chapa y el ladrillo revocado responde a tecnologías "vernáculas" que son reconocidas por todos y fáciles de construir. Los integrantes de la cooperativa le encontraron a la imagen similitudes a las tipologías constructivas de La Boca, un referente iconográfico popular reconocido. Las formas curvas "ablandan" la arquitectura y la hacen permeable facilitando la apropiación de los espacios por parte de los vecinos. El conjunto se completa con un galpón destinado a la escuela-taller, volcado sobre una esquina y con espacio libre por delante para crecer linealmente, un edifico que agrupa bar, quincho y terraza-auditorio, y un pequeño módulo de baño ecológico que habíamos diseñado originalmente para ser instalado en campings, ya que cuenta con calentamiento solar del agua, reutilización en inodoros del agua de las duchas, y tratamiento de efluentes a través de un bio-digestor.
Lo más rico de la experiencia del proyecto fueron las charlas y el ida y vuelta con la comunidad, que se enriqueció con el armado de una maqueta entre varios integrantes, situación que favoreció la proposición y puesta a prueba de las ideas que iban surgiendo. Esta metodología "comunitaria" del diseño será llevada también a las instancias de la construcción, y constituye para el estudio de arquitectura un aprendizaje muy valioso en el plano de lo metodológico-ideológico en cuanto a la gestión de proyectos. Muchas gracias a Comunidad Organizada por invitarnos a participar!
Arq. Nicolás Arrúe
