Villa 21/24
La Casita es un espacio de aprendizaje comunitario llevado adelante por la fundación TEMAS en la Villa 21. La edificación en la que funcionaba no era más que una casita de las tantas que tienen los habitantes del barrio, de construcción muy precaria, con paredes de ladrillo común de canto, y techo de chapas apoyadas sobre cualquier tipo de madera, y superpuestas como “tapando agujeros”, pero sin una caída lógica, lo que provocaba entrada de agua siempre que llovía. Además, la instalación eléctrica era insuficiente, precaria y peligrosa, y la instalación de agua nunca abastecía las necesidades, ya que por la cañería llegaba un hilo de agua. En fin, nada distinto a lo que viven la mayoría de las familias de la villa.
Un signo de esperanza entre tantas complicaciones era el palo borracho que sobrevive en la puerta de la Casita, cuya permanencia en el lugar fue (y es) motivo de grandes discusiones… Para mí, lo dicho: es un árbol, es vida, en un lugar donde la naturaleza no abunda, y por eso abogué por mantenerlo.
Con un presupuesto limitado, y la colaboración de muchas empresas que donaron desde el techo hasta los materiales eléctricos, elaboramos un proyecto de re-construcción basado en unos pocos puntos:
.demoler todas las divisiones internas generando un gran salón multiuso
.hacer un techo nuevo, con caída hacia afuera, y más alto que todos los techos de alrededor
.abrir ventanas altas, aprovechando la altura del techo.
.instalar un tanque cisterna enterrado para que acumule agua durante la noche.
.dejar prevista la ampliación con un entrepiso proyectado a futuro.
.re-distribuir baño y kitchenet en función de la amplitud espacial del conjunto.
El resultado, después de mucho trabajo, y de resolver problemas de toda índole, fue el siguiente:
.el salón que quedó parece más grande que la todos los cuartos de antes juntos: el todo es mucho más que la suma de las partes
.las ventanas en altura logran captar luz solar durante todo el día, ahorrando energía eléctrica y brindando calidez al espacio
.el suministro de agua ahora alcanza para el uso de la casita
.se hizo toda la instalación eléctrica nueva, apropiada y segura
.el nuevo espacio logrado permite continuar con las actividades que se hacían hasta ahora y también imaginar gran cantidad de nuevas actividades, como la realización de asambleas y festivales; la posibilidad de crecer a futuro con un entrepiso multiplica las posibilidades
Creo que, adaptándonos a una realidad compleja, logramos generar un espacio inimaginado. La estrategia de “ir a buscar el sol” por arriba, por simple y obvia que parezca ahora, dió un resultado que parecía imposible cuando uno visitaba la Casita antes. En síntesis, muchas cosas podrían haber salido mejor, pero fue una experiencia de aprendizaje muy positiva, espero que se pueda aprovechar en otros contextos similares.
Agradezco a Fundación TEMAS la posibilidad de participar, proponer y hacer, y a todos los que dieron una mano, cada uno desde su lugar.
Arq. Nicolás Arrúe
